Tras las explosivas declaraciones del ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, de implementar una nueva Reforma Tributaria que dé el dinero que piden las EPS para poder prestar sus servicios y no caer en quiebra, el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, hizo una aclaración importante.

Desde el Pacífico, donde está todo el gabinete del Presidente Petro, explicó que “la reforma que vamos a hacer es solamente para ajustar la tarifa del impuesto de renta corporativa, no es para aumentar ingresos”.

Es decir, va de la mano con lo que había expuesto el Presidente Gustavo Petro, de que la reforma estuviera enfocada en bajar la tributación de las empresas, pero aumentarla a sus dueños, para que el Estado siga financiado y las compañías no entren en riesgo por tener que afrontar una carga importante de gravámenes. 

No obstante, Bonilla terminó su aclaración diciendo que “dejémoslo que divague”, refiriéndose a lo expuesto por Jaramillo el lunes 22 de enero en Bucaramanga.

Las afirmaciones del ministro de Salud surgieron como respuestas a las EPS, que han considerado insuficiente el aumento de 12,01% de la Unidad por Capitación (UPC) para 2024, lo que pone en riesgo el funcionamiento de estas durante 2024.

Jaramillo recordó que el actual gobierno está invirtiendo el 17% del presupuesto nacional en la cartera de salud.